Suerte en el amor

¿Quién no necesita en un momento de su vida un poco de suerte en el amor? ¿Cuántas relaciones se podrían haber salvado de haber tenido un poco más de suerte en el amor en un momento concreto? Para todo en la vida es positivo tener un poco de suerte, pero en el amor es fundamental.
A veces un encuentro fortuito, una casualidad o un suceso inesperado hacen que una relación nazca, se reafirme, supere un bache o se rompa para siempre. La suerte es un factor fundamental en la vida sentimental pero no es fortuita. La suerte se puede provocar. Este sencillo ritual os enseñará a provocar la suerte en el amor. suerte en el amor

Ritual para tener suerte en el amor

Colocamos en un plato de cristal tres pétalos de rosa formando una estrella con las puntas hacia dentro, en el centro ponemos una vela sobre los tres pétalos, realizamos un círculo sobre ellos con azúcar blanco y sobre la vela espolvoreamos un poco de canela. En un papel rojo escribiremos la palabra “amor” con tinta negra, le daremos dos dobleces y lo colocaremos bajo el plato. Durante la noche encenderemos la vela y dejaremos que se consuma totalmente.
A la mañana siguiente cogeremos el papel doblado y lo llevaremos siempre con nosotros, en una cartera o en un bolso. Asegurándonos de que siempre está a nuestro lado, teniendo cuidado si cambiamos de cartera de llevar el papel siempre con nosotros durante al menos una semana.
Pasado ese tiempo, nuestra energía vital ya habrá recibido el influjo del conjuro y en poco tiempo empezaremos a percibir cómo nuestra suerte en el amor cambia. Sin razón aparente, nuestra relación sentimental mejorará, estaremos más a gusto con nuestra pareja, sentiremos que la relación nos llena más y que somos más felices junto a esa persona. Si estamos buscando el amor de alguien, sucederán casualidades que nos pondrán más cerca y el tiempo hará su trabajo a nuestro favor.Un poco de suerte es fundamental en la vida, y a veces un pequeño ritual es todo lo que necesitemos para que ésta se ponga de nuestro lado. En muchas ocasiones, un pequeño cambio puede alterar positivamente nuestra vida para siempre.

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