Las rupturas nunca son casuales. Cuando todo parece ir bien y sin motivo aparente las cosas se tuercen, es muy posible que se deba a factores externos. Puede ser que alguien entrometa, pero por lo general el novio que rompe una relación que va bien es porque está con otra mujer. Hoy os voy a contar un caso que me sucedió hace un tiempo de una mujer que quería saber cómo recuperar a su novio temiendo que él estaba con otra mujer.
“Hola Paloma. Me llamo Isabel y necesito tu ayuda. No sé cómo recuperar a mi novio. Llevábamos saliendo casi tres años y todo iba bien pero de un tiempo a esta parte la relación se estaba enfriando. Yo no sabía la causa y no me podía imaginar nada, pero un día me dijo sin más que necesitaba tomarse un tiempo. El caso es que lo dejamos y dos semanas después una amiga me dijo que él estaba con otra, que les había visto juntos saliendo de un cine en una actitud muy… “cariñosa”. Saber que está con otra y que esa es la causa real de la ruptura fue un mazazo terrible. Yo sé que él me quiere porque cuando hemos quedado se lo he visto en la mirada y yo le amo con todo mi corazón. No sé vivir sin él y quiero recuperarlo. Necesito que me digas cómo puedo recuperar a mi novio y alejar a esa mujer de su vida, ya que me temo que si ella no desaparece, no voy a poder recuperarlo.”
Realicé una lectura sencilla sobre esa relación y pude ver que efectivamente él seguía queriendo a Isabel. La suya había sido una relación muy estable y satisfactoria para los dos, eran felices hasta que él conoció a esta otra mujer. Ella ejercía una atracción sobre él casi magnética, le había deslumbrado y había sabido insistir y utilizar todas sus armas de mujer. No paró hasta que consiguió tenerlo a su lado. Pero esa relación no era verdadera. Ella sólo quería conquistarlo y amarrarlo a su lado y él solo se había dejado llevar, primero por la atracción y ahora porque ella no le permitía alejarse ni un centímetro, lo consideraba suyo y lo había atado en corto. No le iba a permitir marcharse fácilmente.
Tras la lectura y considerando todas las características de su vínculo de pareja, le recomendé a Isabel realizar un hechizo de amor con miel para recuperar a su pareja, de esa manera potenciaría los sentimientos de su novio sobre ella y le haría ver todo lo que tenían antes juntos que ahora no tenía. Una semana después debería realizar un hechizo de alejamiento sobre esa otra mujer. De esa manera ella perdería el interés por su novio y dejaría de llevarlo a su lado. Si perdía el interés en él, simplemente se marcharía.
Así fue: un mes después de realizar el último ritual, le escribí a Isabel para saber cómo iba todo y me comentó que hacía dos semanas que su novio había roto con aquella otra mujer (en realidad se enteró de que fue ella la que le había dejado) y había vuelto arrodillado, arrepentido de lo que había pasado. Estaba deseoso de volver a su lado porque se había dado cuenta de que era mucho más feliz cuando estaba con ella. Ahora era Isabel la que había decidido tomarse las cosas con calma y comenzar poco a poco, para que él se diese cuenta del error que había cometido y para evitar que volviera a pasar algo así.
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