Los remedios florales de Bach, también conocidos comúnmente como “flores de Bach” son un conjunto de 38 preparados naturales a base de flores y otras partes de plantas que se pueden encontrar en Gales, de donde era originario el profesor Bach, descubridor de este método.
El valor terapeútico de las flores de Bach reside en su capacidad para aliviar todo tipo de desequilibrios psicoemocionales y de la personalidad, tales como ansiedad, incertidumbre, miedo, ira, confusión, timidez… Basado siempre en la hipótesis de que este tipo de enfermedades son debidas a una falta de armonía debida a un conflicto entre el alma y la personalidad, lo cual se manifiesta mediante desequilibrios en el aspecto emocional y mental del individuo.
Siempre he sido de la opinión de que la medicina moderna, basada en el conocimiento de lo que podemos ver es poseedora de una gota de saber, y que todavía nos queda un mar por explorar. La medicina moderna trata las dolencias del cuerpo y muy levemente las de la personalidad, olvidando las del alma y el aura. Las flores de Bach son muy adecuadas para remediar dolencias provenientes de conflictos entre la personalidad y el alma, mucho más frecuentes de lo que creemos.
Descubrí hace ya muchos años las propiedades de las flores de Bach tras una época de jaquecas que nadie era capaz de remediar, desde entonces las he estudiado en profundidad, las he recomendado en multitud de ocasiones y debo decir que son una fuente de bienestar y armonía con uno mismo.
Con esto no quiero decir que no se deba recurrir a la medicina occidental moderna, en absoluto, su método como ya he dicho tiene su verdad y ofrece soluciones muy efectivas para determinado tipo de problemas, pero para las dolencias del alma y para los estados de alteración emocional y del alma siempre recomiendo utilizar las flores de Bach.
Deja una respuesta