Hechizo de alejamiento en luna nueva
Cómo hacer un hechizo de alejamiento en luna nueva
La luna nueva es una fase muy poderosa y a la vez muy ambigua. Es la fase del fin, de la ruptura, de la oscuridad absoluta. Y al mismo tiempo es de renacimiento. Un hechizo de alejamiento en luna nueva es perfecto cuando lo que buscas es potenciar que la persona que te busca tenga un nuevo comienzo. Mediante la influencia del hechizo de alejamiento en luna nueva conseguirás que la persona a la que quieres alejar centre su atención en otra persona.
Un hechizo de alejamiento en luna nueva es perfecto cuando intentas alejar de tu vida a un ex novio que no termina de asumir que todo ha acabado, o un ex marido que te sigue buscando a pesar de que a su alrededor hay otras mujeres interesadas en él.
El hechizo de alejamiento en luna nueva es siempre un hechizo de magia blanca, ya que no sólo potencia el alejamiento de esa persona, sino que también le ayuda a comenzar de nuevo para encontrar el amor de nuevo. No hay más ciego que el que no quiere ver, y en ocasiones hay hombres incapaces de aceptar la realidad. Un hechizo de alejamiento en luna nueva le ayudará a pasar página, comprender que todo acabó y que es el momento de avanzar.
Hechizo de amor con luna nueva
El hechizo de alejamiento es uno de los más habituales en luna nueva. La mayoría de hechizos para enamorar no se realizan en esta fase, ya que simboliza el comienzo y el fin. Por otra parte la fase de luna nueva también puede simbolizar la muerte, por eso es bastante utilizada en magia negra, pero no es el caso.
No hay ningún problema en realizar un hechizo de alejamiento en luna nueva siempre que el hechizo sea de magia blanca y que tus sentimientos hacia la persona que quieres alejar sean positivos. Si deseas lo mejor para él jamás será un hechizo de magia negra.
Efecto de la luna nueva
La luna nueva muy posiblemente es la fase lunar más ambigua. Las otras tres tienen un significado claro, crecimiento, plenitud y declive, pero la luna nueva es el cambio de ciclo, volver a empezar.
Desde antiguo la fase de luna nueva ha sido temida y venerada al mismo tiempo. Suponía la oscuridad más absoluta, el punto en el que nada se ve, pero al mismo tiempo también es el cambio de ciclo. Un nuevo comienzo, una nueva esperanza.
Incluso en la noche más oscura basta con la luz de una estrella para saber hacia dónde avanzar. En la noche de luna llena este dicho se hace especialmente cierto.
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