Las relaciones a distancia suelen ser difíciles de llevar en la mayoría de los casos. Una amiga me decía así en mi tarot online, -Mi novio ha encontrado un trabajo en otra ciudad y temo que la distancia nos aleje-. Veamos cómo esta amiga nos cuenta su caso.
“Hola, Paloma. Hace dos años que tengo una relación y hasta ahora todo había marchado bastante bien entre nosotros. El año pasado mi novio se quedó sin trabajo y todo este tiempo lo ha estado pasando bastante mal, aunque yo le he apoyado siempre y le animado a que aprovechara para hacer un master y adquirir mayor preparación. El problema es que, ahora, mi novio ha encontrado trabajo en otra ciudad y temo que la distancia nos aleje. Este trabajo está a doscientos kilómetros de nuestra ciudad, por lo que tendremos que vivir separados durante la semana, e incluso algunos fines de semana en que yo tengo guardia y no podré verlo. Aunque sé que es una buena oportunidad profesional para él, temo que esta distancia pueda hacer mella en nuestra relación y he estado tentada de pedirle que renuncie a él. Por favor, necesito que me orientes en todo esto. Crees que debería pedirle que deje pasar esta oportunidad, y si lo hago, ¿esto repercutirá, a la larga, de forma negativa en nuestra relación? No sé qué hacer y necesito una respuesta urgente.
Amores a distancia
Qué duda cabe que no tiene nada que ver una relación que nace en la distancia, con otra que se ve forzada a la separación en un momento dado. Esta amiga tenía muchas dudas y miedos sobre esta separación tras dos años de convivencia, ya que, como me contó cuando contactamos, la mayoría de compañeros en su nuevo destino eran mujeres, lo que la hacía sentirse bastante insegura. Además, debía tomar una decisión con premura. Le aconsejé realizar una lectura de tarot, para saber hasta qué punto esta separación iba a suponer un riesgo en el buen funcionamiento de la pareja. Las cartas mostraron que los sentimientos de su novio eran fuertes y que su compromiso formaba parte de su proyecto vital presente y futuro. Además, las cartas mostraron que, en poco tiempo, tendría opción a un puesto en esa misma empresa que estaría bastante más cerca de casa, y las cartas mostraban un futuro en común. Estas palabras tranquilizaron bastante a mi amiga pero, así y todo, le ofrecí realizar un ritual para abrir caminos, para que las circunstancias siempre les fuera favorable en pos de esa relación que parecía estar a salvo, pero siempre hay que estar alerta. Con este ritual nos asegurábamos que nadie interfiriese de forma voluntaria en las expectativas de esta pareja. Mi amiga podía estar tranquila porque su novio estaría a salvo de cualquier influencia negativa en la que pudiera estar interesada cualquier mujer en su lugar de trabajo. Tras seis meses fuera, mi amiga se puso en contacto para decirme que a su novio ya le había ofrecido una plaza a sólo quince kilómetros de casa, y que él le había pedido matrimonio.
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