Una amiga se ponía en contacto a través de mi tarot online, porque quería saber cómo debía actuar para conquistar a un hombre. Estas eran sus palabras: -Paloma, quiero saber cómo conquistar de verdad al hombre que amo-. Os dejo su testimonio como ejemplo de todo lo que podemos conseguir siguiendo unos sencillos consejos sobre rituales y hechizos de magia blanca.
“Saludos, querida Paloma. Tengo miedo a hacer el ridículo frente al hombre del que me siento enamorada, y por eso quisiera que me mostraras la forma de conquistarlo sin que parezca una mujer poco experta. No soy demasiado atractiva y temo que él me rechace. Mis amigos y familiares siempre me están diciendo que valgo mucho como persona y que cualquier hombre debería estar orgulloso de ser mi pareja, pero soy tan insegura que nunca me he atrevido a mantener relaciones con los hombres. Él ha enviudado hace un año y desde entonces no ha tenido ninguna relación, que yo sepa sólo se dedica a trabajar y cuidar de su hijo, al que yo adoro y él también me tiene mucho cariño, ya que somos vecinos. Estaría dispuesta a cuidar de los dos y formar una auténtica familia, pero el miedo al rechazo hace que no me atreva a dar ningún paso.”
Perder el miedo a la conquista por medio de un hechizo de magia blanca
Desde luego, mi amiga sí que había dado un primer e importante paso: contactar con mi tarot online era una forma de dar el primer paso hacia una solución para alcanzar aquello que tanto deseaba. Tras contactar con ella, le aconsejé realizar una lectura de tarot, para averiguar el estado sentimental del hombre al que quería conquistar, de esta manera decidiríamos qué tipo de hechizo era el más adecuado para este caso particular. Las cartas mostraron que el hombre seguía sumido en el duelo por la esposa fallecida, pero sentía un aprecio y una gratitud sincera hacia mi amiga. Reconocía en ella a una mujer especial, llena de virtudes, aunque hasta ahora se había tomado su tiempo antes de volver a pensar en mujeres. Pero ella era una mujer de la que podía llegar a enamorarse y sólo era necesaria una pequeña ayuda, una chispa capaz de iniciar la relación y ayudar a ese hombre a superar su dolor. Le manifesté a mi amiga que era ya el momento de dar un paso adelante y le propuse realizar un hechizo de magia blanca con miel para conquistar a un hombre. Con este hechizo su vecino sería capaz de mirar más allá de su dolor y comenzar a pasar página.
Diez días más tarde mi amiga me hizo partícipe de una preciosa noticia: el hombre del que estaba enamorada le había dado muestras de sentirse muy interesado por ella, pero no de la manera que lo había hecho hasta ahora, sino como lo hace un hombre por una mujer por la que se siente atraído. Por fin conocía la magia de esos primeros momentos de acercamientos y confesiones, y eso la hacía sentirse tremendamente feliz y femenina.
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