Cuando se trabaja la cartomancia con el tarot Osho la carta de la Voz Interior es una carta de silencio, nos muestra el lenguaje del corazón, para el que las palabras no son necesarias. En una lectura de tarot online es una guía interior que nunca miente, siempre muestra el camino a seguir como una brújula, de una forma contundente y testaruda. En cartomancia del tarot Osho La voz interior nos muestra un rostro en silencio, alerta, observando todo lo que sucede, tanto la luz, simbolizada por el cristal que aparece en el centro, como la oscuridad que rodea a toda la escena. 
Es una carta de una profunda dualidad, la lucha de la luz frente a la oscuridad frente a un observador silencioso. En una lectura de tarot puede indicarnos una lucha entre lo que queremos y lo que sentimos, nuestras emociones aparecen y desaparecen como esos dos delfines que rodean la escena.
Esta carta en una sesión de cartomancia con el tarot osho se conecta a todo lo que nos rodea a través de la corona de luna creciente y está unida a todo lo terrenal a través de las hojas del kimono que viste la figura central.
Cartomancia con el tarot Osho: Interpretación de Voz Interior en una lectura de tarot
En cartomancia con el tarot Osho la carta de la voz interior simboliza el silencio necesario para encontrar nuestro propio camino cuando todo a nuestro alrededor es ruido y confusión. Si nos tomamos el tiempo necesario para poder escuchar a nuestra voz interior tomaremos la decisión acertada.
“Una vez que encuentras la verdad dentro de tí mismo, nada de lo que puedas encontrar a tu alrededor podrá variarla”. La carta de voz interior es una invitación a abrir los ojos y descubrir lo que es realmente importante en la vida, sin dejarnos llevar por el día a día y los problemas cotidianos que terminan por ocupar nuestra mente completamente. Es una invitación a la meditación y a la valoración real de las cosas.
Si somos capaces de descubrir qué es lo que es realmente importante en la vida, podremos poner a cada cosa en su sitio y darle el valor adecuado. Ese es el único camino para lograr lo único que importa en nuestra existencia: La felicidad.
Una vez que vives la verdad de tu existencia, la vida se convierte en una celebración de lo que somos y lo que podemos llegar a ser. Sin descuidar las obligaciones ni los trabajos cotidianos, pero conscientes de que esas labores son un medio para conseguir lo que realmente queremos, no un fin en sí mismas.
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